Así lucen el Santísimo Cristo de las Tres Caídas y Nuestra Señora de la Esperanza para el periodo estival.
Nuestra Señora de la Esperanza aparece vestida con saya blanca de tisú y manto de otomán blanco, realizados por el taller de Fernández y Enríquez con bordados de Benjamín Pérez. Lleva toca de sobremanto de encaje de oro y un rostrillo de encaje de punto de aguja de Bruselas.
El Santisimo Cristo de las Tres Caídas luce túnica burdeos lisa confeccionada por Paleteiro, con cíngulo de oro y borlones de bellota.
En la bocamanga exhibe también gemelos de oro en forma de ancla.